domingo, 29 de mayo de 2011

VOS




Tu aliento despierta en mi oído la calidez del fuego en invierno; sólo sé que mi corazón se ralentiza, vuelo con los ojos cerrados agarrada de tus manos y nada me importa. Estaba cansada de tristezas y víctimas. Ilústrame con tu leve sonrisa cuando parodias el peligro. Dices: los conflictos de hoy sobre mis raíces son el árbol del mañana. Eso es lo que siempre busque; el que mira a través de la ventana el amanecer sin importarle el mañana; encontraremos la migaja de cada día para seguir viviendo hasta que llegue la hora.
Tus palabras ignoran todas las carencias materiales. Eres capaz de alimentar el alma con un simple libro leyendo para mí bajo el pino. El día se me hizo largo hasta que llegaste pero valió la pena la espera. No quería dinero ni tesoros sólo buscaba lo que tú supiste ver. La felicidad no se indaga se haya dentro de cada uno de nosotros; nos atiborramos tanto que olvidamos que la llevamos puesta.
Investigaste por toda la tierra hasta encontrar a alguien que supiera el secreto a voces, rebosar de emociones, de sentidos, de risas y llantos. Buscabas unos ojos que escucharan el viento y el ulular de las palomas, las lágrimas resbalando, un beso en unos labios, las caricias de una voz dulce sobre tu rostro. La eternidad es haber sentido al menos por un instante la verdadera pasión, el orgullo de unos vástagos compartiendo recuerdos y aventuras, la tibieza de unos padres amando a sus hijos hasta dejarse la piel.
Me encontraste. Me dijeron que esperara y permaneciera quieta; así lo hice hasta que arribaste en mi puerto. Y si esta noche mi sueño se hace eterno no importará; a los que quiero lo saben, los que me quieren lo sé; he sido leal a mi corazón aun cuando me equivoqué y tuve que pedir perdón, viaje por mundos infinitos sin levantar un palmo. No tuve ni tengo que firmar un papel para que los demás sepan que te amo.
Sigue agarrándome fuerte con tus grandes y nudosas manos, aquellas que me guardan en la tempestad y me hacen intrépida ante cualquier reto ¿Qué saben ellos de nuestro amor y de nuestras preocupaciones? nunca nos lamentamos de lo que se nos viene encima; sólo buscamos el sendero adecuado para salir y ver el sol, aunque sea rocoso y con miles de dificultades. A nosotros el árbol no nos impide ver el bosque, ni una nube nos nubla el día. Por eso ellos se quejan y nosotros nunca lo hacemos. Nos tachan de ingenuos y locos, sin previsiones ni dinero en el banco. Tontos más que tontos, un minuto puede arrancar una vida, me alimento de su veneno.
Tumbados oímos el violín de Itzhak Perlman interpretando “Memorias de África” nuestra melodía. La hemos oído tantas veces y aun nos sigue emocionando como la primera vez y nunca dejará de hacerlo; pues nos reinventamos en cada compás como si fuera el único y el último. De este modo nunca dejaremos de apreciar las estrellas y la luna.

jueves, 26 de mayo de 2011

LIBROS


De pequeña solía bajo las sábanas y con una linterna devorar libros. Sigo leyendo pero sólo de vez en cuando aparece un libro en mi vida que me absorbe y seduce. Siempre me gustó leer.
Desaparecí por unos días. Me embaucó uno de esos libros que pasará a formar parte de mis textos especiales. No sé por qué pero me revelan toda clase de emociones. Una determinada frase hace asomar lágrimas. Un párrafo narrando una situación hace emerger la más sincera de las sonrisas. Una descripción me llena de aromas, sonidos o sabores. Me enseñan datos históricos. Alejan la realidad imbuyéndome en fantasías que necesito para ahuyentar mal sabores. Llenan mi mente de temas que admiro.
Alguien dijo que los textos llegan cuando uno los necesita o los deseo. Soy compradora de libros compulsiva pues mis compras están guiadas por mi corazón e intuición. A veces cuando esos libros caen en mis manos pienso si es casualidad o causalidad.
No sé muy bien por qué me hacen viajar siendo de diferentes estilos. Cuando llegan pasan a formar parte de mis experiencias como aquel que viaja y acumula las fotos de sus vaivenes.
Uno de mis especiales es Iacobus de Matilde Asensi. Novela histórica de aventuras ambientada en la época del final de las cruzadas, cuando la orden del Temple fue disuelta y eliminada. Su personaje principal, Galcerán de Born, monje de una orden militar y médico, regresa a la península para traducir ciertos libros y localizar a un joven que fue abandonado, su hijo. Pronto será llamado por el Papa Juan XXII para investigar las muertes de su antecesor el papa Clemente V la del rey Felipe IV de Francia tras la ejecución del Gran Maestre de la Orden del Temple. Acompañado por el joven novicio García y con la ayuda de una hechicera judía que conocerán en París, Galcerán desentrañará una trama más allá de las muertes del Clemente V y Felipe IV, descubriendo el inmenso poder oculto de la orden del Temple.
Otro de mis especiales es El Señor de las Llanuras de Javier Yanes. El deseo de recuperar el mundo perdido de su niñez lleva a un joven periodista a emprender un viaje tras los pasos de su enigmático abuelo, un escocés aventurero que vivió una tumultuosa historia de amor con la abuela del protagonista y que desapareció misteriosamente en África. La investigación le conduce hasta Kenia, a un lugar mágico poblado de maravillosas historias y de personajes fascinantes. las críticas dijeron de dicha historia: “Aunque no es un best seller, ni una novela de aventuras, ni mucho menos una novela histórica, y aunque no es un thriller, un libro de viajes ni, tampoco, una historia romántica, es al mismo tiempo un poco de todo y mucho de algo distinto. Una historia que conjuga la magia de Memorias de África y la acción de El guardián de la flor de loto”
"El Descubrimiento de las Brujas" ha sido mi última adquisición, un cúmulo de todos los temas que me apasionan. Brujas, vampiros, órdenes militares, la figura y leyenda de Lilith que según el folclore judío fue la primera mujer de la humanidad y la primera mujer de Adán antes de la propia Eva, la noche de las brujas, los libros, el vino, la historia y la mezcla de ficción y realidad. Me ha hechizado y nunca mejor dicho. Pertenece a una trilogía de Deborah Harkness, historiadora americana, es su primer libro de dicha trilogía. Por unos días he vivido con Mateo y Diana, los protagonistas un viaje maravilloso.
Os he mostrado parte de mi corazón con la mención de estas tres narraciones para mi magnificas. Todo lo que es capaz de destapar sentimientos, seducir y transmitir, por criterio propio, es un buen libro.

lunes, 2 de mayo de 2011

MENSAJE EN LA BOTELLA




Todos los días,
en la vorágine de la rutina,
tanto si el viento arrecia,
como si la tempestad amaina,
buscamos el mensaje en la botella
que nos despeje las nubes del alma.
Aquella botella semienterrada en la arena,
antigua, deslucida
que un día fue insólita.
Al quitar el corcho que la adormece
deja escapar el mágico elixir.
Amar para siempre con breves palabras.